La naturaleza ha sido caprichosa (y generosa) regalándonos paisajes increíbles. También el ser humano, ancestral o más actual, nos ha legado maravillosas obras del que desconocemos el significado, pero de una belleza intachable. Os dejamos unos cuantos ejemplos de esos lugares tan bellos como intrigantes.

DEMONIOS DE PIEDRA (Zelizy, República Checa):

En Zelizy, un pueblo cercano a Praga, el artista Vaclav Levy talló en las rocas dos cabezas de demonio para proteger a esta pequeña población y sus bosques aledaños. Están situados en la parte sur del pueblo y son visibles desde la carretera.

Este autor de fama mundial trabajó fundamentalmente en temas religiosos, por lo que estas figuras de demonios son realmente únicas.

CÍRCULOS DE LA MUERTE (Gambia y Senegal):

Estos extraños círculos formados por menhires alrededor de un sepulcro son todo un misterio para los antropólogos y arqueólogos actuales, a pesar de la gran cantidad de que hay repartidos por Gambia y Senegal. Hay verjas fabricadas con huesos dentro de estas tumbas, incluso también hay dentaduras encajadas en cuencos.

Hoy en día, los lugareños colocan una pequeña piedra o una hortaliza como ofrenda a estos ancestrales muertos, y piden un deseo.

CICATRICES EN FORMA DE ROSA (Bosnia):

En Sarajevo, la capital de Bosnia, aparecieron rellenos de pintura roja las marcas que dejaron las bombas de mortero de la época de la guerra de los Balcanes. Estas marcas, que reflejan el sufrimiento de los bosnios y el asedio al que fueron sometidos, al ser rellenados de pintura parecen flores, un homenaje no sólo a las personas que perecieron, sino también a todos los que sobrevivieron a las más de 300 bombas diarias que cayeron en Sarajevo durante esos largos cuatro años.

Estas rosas están por toda la ciudad y algunos voluntarios las cuidan y las restauran de las pisadas, el paso del tiempo, las inclemencias del clima o, simplemente, porque la calle se asfalta.

Es el homenaje y la memoria de una guerra terrible contra la población civil de este pequeño país.

BÚNKERES DE ALBANIA:

El sistema de búnkeres que se diseñó durante la dictadura de Hoxha para sobrevivir a un ataque enemigo se extiende por todo el país, especialmente en las zonas montañosas, aunque también cerca de Tirana, su capital. Jamás existió tal ataque, por lo cual, estos búnkeres se han utilizado como almacenes, refugio para la ganadería, incluso viviendas en épocas económicas complicadas que han azotado este pequeño país en numerosas ocasiones.

Cada vez quedan menos, muchos de forma ruinosa, pero para los albaneses forman parte ya de su paisaje y se pueden visitar, pese a su mal estado, es una visita curiosa.

PIRÁMIDES DE STOB (Bulgaria):

Muy cerca de la turística Rila, podemos caminar a través de estas espectaculares agujas de areniscas que se alzan sobre las verdes praderas. Se formaron por la erosión y la nieve, pero la leyenda que cuentan los habitantes de Stob es que cada una de esas agujas es un invitado a la boda que se celebró hace muchos años y que se convirtieron en piedra al ver que el padrino besaba a la novia.

Stob está situada a una hora caminando desde Rila o a cinco minutos en coche.